Gestionar el inventario es una parte importante de cualquier negocio minorista. Desde la forma de almacenar el inventario hasta el método de preparación de pedidos, los procesos sólidos de gestión de almacenes ayudan a los minoristas a dirigir sus almacenes como una máquina bien engrasada. En esta guía se explica cómo. La gestión de almacenes es el conjunto de procesos operativos que ayudan a que un almacén funcione con eficacia.
Un sistema de gestión de almacenes (WMS por sus siglas en inglés) es el software que ayuda a una empresa a realizar las tareas operativas dentro de su almacén. Un SGI es una subsección del proceso de gestión de almacenes, de ahí que deba estar integrado en tu WMS. Utiliza el software de inventario para hacer un seguimiento de los datos y prever la demanda. El WMS extraerá estos datos y agilizará la forma en que el personal del almacén se abastece de inventario, como la visualización de la ubicación de una sola SKU dentro de un almacén de 10,000 pies cuadrados.
Utiliza un portal de autoservicio, como el que se encuentra en Shop App, que muestra la ubicación de tu pedido en cualquier momento. Tu sistema de gestión de almacenes es el que extrae estos datos una vez que el pedido se ha marcado como realizado en un centro de distribución. Utiliza el software de gestión de almacenes para procesar las devoluciones, aprobarlas para su reembolso, reetiquetar el inventario y devolverlas a las estanterías. Como explica Kurt Ellis, presidente de GLF E-Commerce Fulfillment, los conocimientos basados en datos del software de gestión de almacenes e inventarios también pueden utilizarse para identificar patrones de comportamiento de los clientes y ayudar a realizar ajustes en las políticas, como limitar el número de artículos que un cliente puede comprar en diferentes tallas o colores para reducir el índice de devoluciones, y ayudar a evitar la necesidad de descontar artículos no deseados.
El software de gestión de almacenes BlueYonder informa que sus clientes ven un aumento del 25% en el compromiso de los empleados utilizando sus funciones de gestión laboral. Los gastos de mano de obra también se redujeron en un 35%. La tecnología de gestión de almacenes tiene claras ventajas para los almacenes con gran actividad. Como dice Elliott Davidson, consultor de comercio electrónico Parcel Master, no tener que pensar y gestionar un proceso tan complejo como la gestión del inventario, y saber que alguien especializado en ello está asumiendo las presiones y responsabilidades, te permite centrarte en otras áreas del crecimiento del negocio. A pesar de las ventajas que ofrece un sistema para gestionar el inventario, no todos los sistemas son iguales.
Esto significa que no tienes que preocuparte por comprar inventario antes de realizar ventas y terminar con productos sin vender. Pero una vez que tu inventario caiga por debajo del nivel deseado, ¿cómo sabrás qué cantidad debes pedir? Por eso debes establecer un nivel máximo para cada producto. Si sabes que un SKU vende 500 unidades a la semana, pero tarda tres semanas en recibir los envíos del proveedor, por ejemplo, configura una alerta para notificarte cuando los niveles caigan por debajo 2,000 (dejando margen extra por si hay contratiempos). Un punto reposición es un número que representa el nivel mínimo viable para cada producto o el inventario por producto más bajo posible sin correr riesgo vender todo y quedarse sin nada.
Naturalmente, los consumidores esperan importantes descuentos y puede que venda a pérdida (si es que vende los artículos).